Activistas, académicos y grupos indígenas denunciaron diversas violaciones a sus derechos e incluso un desacato por parte de las autoridades en la construcción del Tren Maya, luego de que Fonatur y la Sedena solicitaran la revocación a la suspensión otorgada por el Juzgado Primero de Distrito en Yucatán y ratificado por el Tribunal Colegiado.
Integrantes del Consejo Regional Indígena y Popular de Xpujil (CRIPX) resaltaron que en México el Poder Ejecutivo predomina sobre el Legislativo y Judicial y recordaron que siempre en campañas se habla del mismo discurso de respetar la división y autonomía de cada uno con frases como “nadie por encima de la ley”.
Empero, a su consideración, en la actual administración sucede todo lo contrario, por la imposición de decretos, circulares e iniciativas, con expropiaciones que sólo llevan al presidencialismo autoritario y sometimiento político.
“El objetivo de estar aquí son los impactos en la Península del mal llamado Tren Maya, que nosotros siempre hemos dicho que no es maya y no es el tren nada más, sino es mucho más allá. La idea es darles a conocer no sólo el aspecto jurídico, sino que existe violación a los derechos colectivos de distintas formas, ambientales, sociales, culturales, arqueológicos y demás”, indicó Romel González Díaz, coordinador de Democracia del Bien Vivir del CRIPX, en rueda de prensa, celebrada en conocido hotel de la ciudad.
Asimismo, señalaron que los megaproyectos implementados por el gobierno actual no son la excepción del ejercicio unilateral que ejerce el Ejecutivo sobre el Poder Judicial, con los acuerdos que otorgan facultades a organismos como Fonatur para obras que no son de su injerencia y organizaciones de corte militar, haciendo a un lado a la Secretaría de Transportes.
Para el CRIPX, el indebido proceso legal se presenta de diversas formas desde el hecho de desechar, la negación o no admisión de pruebas y peritajes, así como la violación a los derechos procesales.
“Estamos acá por los problemas del Tren Maya, donde no hubo una buena consulta hacia los pueblos indígenas, nada más ante las autoridades, pero a nosotros como pueblos o comunidades no nos tomaron en cuenta, como campesinos y madres de familia nos está afectando, con nuestros hijos no estamos tan seguros que vayan a la escuela, yo vivo lejos de la cabecera municipal y no me siento tan segura que estén lejos de mi porque ya hay mucha delincuencia”, expresó Gerónima López Hernández, habitante de Nueva Vida Calakmul, integrante maya tzeltal.
“Hay escasez de frutas y verduras en Xpujil por tanta gente que ya hay, por los trabajadores, ya no nos damos abasto con los alimentos básicos. La militarización en las comunidades nos está perjudicando, nosotros vivimos de la leña, cocinamos con leña y nos están prohibiendo consumirla, por eso estamos en la lucha y estoy como defensora comunitaria”, agregó.
Los manifestantes aseguraron que les fue concedida la suspensión de las obras, ratificada por un Tribunal Colegiado desde mayo de 2020, mientras que la Revocación presentada por Fonatur y Sedena fue revocada y al continuar con el proyecto se viola el estado de derecho.
“Nosotros nos dedicamos a la apicultura y en esas actividades somos afectados, igual en el campo, pero hay desorden en la comunidad, se hizo un grupito de gente que por ejemplo antes no había consumo de alcohol y hoy por hoy, los fines de semana, son de borracheras, escándalos que antes no había, estamos buscando como tener un diálogo con esas personas, porque son jóvenes vulnerados monetariamente”, dijo, por su parte, Nicolás Moreno Jiménez, también maya tzeltal.
“Los menores de edad tiene más visión hacia el desarrollo, pero yo pregunto cuál desarrollo si sólo es destrucción, dinero no llega al hogar, el desarrollo para nosotros es trabajar la tierra. Otra afectación es la energía eléctrica, porque hay una descarga en las labores del tren, utilizan mucha energía para la construcción y los que tienen tienditas tienen perdidas en sus productos y se queman aparatos electrodomésticos”, añadió.
Los asistentes dejaron en claro que seguirán en la lucha y en busca de ser escuchados, sobre todo por la vía legal.
A la rueda de prensa asistieron igualmente el abogado Israel Negrón; Raúl Aldama Gavilán, representante del Tramo 5; además de Ana Esther Ceceña, investigadora de la UNAM, entre otros invitados de agrupaciones como “Sélvame del Tren”, CEMDA, Greenpeace y Nuestro Futuro.