Frente a las altas temperaturas, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán orienta sobre la importancia de mantener una adecuada hidratación a las y los niños, así como adultos mayores, con la finalidad de evitar riesgos en su salud y desarrollo.
El doctor Julio Francisco Hernández Carrillo, coordinador auxiliar del Primer Nivel de Atención, indicó que algunas complicaciones que pudieran presentarse en el organismo de menores de edad y adultos mayores, en caso de no mantener una adecuada hidratación son: estreñimiento, deshidratación, golpe de calor o hasta problemas en vías urinarias, entre otras.
Por lo tanto, mencionó que, sobre todo durante los periodos en los que se registran altas temperaturas, hay que supervisar a las y los niños, así como adultos mayores, para que consuman un promedio diario de 1.5 a 2 litros de agua simple potable, ya que además de prevenir la deshidratación, les ayudará a desarrollar adecuadamente funciones fisiológicas como: la respiración, coordinación motriz, circulación, concentración, etcétera.
Beber cantidades suficientes de agua favorece el orinar con mayor frecuencia, lo que es bueno para la limpieza de los riñones y, para prevenir infecciones en las vías urinarias, al evitarse la proliferación de bacterias en este órgano.
En los menores de edad, el mantener una buena hidratación les ayuda a regular la temperatura corporal y favorece a que la sangre transporte oxígeno con mayor facilidad a cada uno de los órganos. También los ayuda a tener un mejor proceso de digestión.
De igual forma, las articulaciones, los huesos e incluso sus dientes se ven beneficiados, además que al estar hidratados mejoran su estado de ánimo, memoria y atención.
El doctor Hernández Carrillo explicó que, cuando el organismo registra falta de agua, genera una sensación de sed y surge la necesidad de ingerir líquidos. Si esto no sucede, se desencadena el proceso de deshidratación u otras complicaciones generadas por esta misma condición, por ejemplo: mareos, aspecto de tener los ojos hundidos, fatiga, dolores de cabeza, calambres musculares, delirios, entre otros.
En ese sentido, sugirió que las y los adultos mayores fortalezcan el consumo de agua simple, así como en los menores de edad, controlar la ingesta de refrescos, jugos u otras bebidas endulzadas.
Finalmente, en caso de tener alguna duda o sospecha de deshidratación recomendó acudir a los Módulos PrevenIMSS, ubicados en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), de lunes a viernes, de 8:00 a 20:00 horas; para recibir orientación del personal de Salud y en caso de ser necesario, se les brinde sobre de Vida Suero Oral o canalicen con el especialista pertinente para evitar mayores complicaciones.