El lanzador Oliver Pérez jugó su último juego profesional y lo hizo donde todo comenzó: con los Leones de Yucatán.
El número 16 del ex ligamayorista fue retirado en una jornada histórica, en la que los melenudos barrieron su serie ante Campeche.
Con temporadas en las Grandes Ligas, Pérez vistió por última vez los colores de los Leones de Yucatán, con los que debutó en el 2000, despidiéndose ante más de 11 mil aficionados y con una victoria 9-5 sobre los Piratas.
Cerró su ilustre carrera con labor de un tercio, en la que ponchó a su último bateador. La directiva de los Leones armó fiesta de juegos artificiales y le retiraron su número 16 enmarcado en los libros de historia de la organización.
Nacido en Culiacán Sinaloa, un 15 de agosto de 1981, Oliver firmó con los Leones de Yucatán en 1997. Al año siguiente jugó béisbol amateur en la Liga de la Primera Fuerza de la Dolores Otero en Mérida, donde demostró su gran capacidad como lanzador.
Luego de ello, los Padres de San Diego lo firmaron y a sus 17 años tuvo su primera experiencia en sucursales de Ligas Mayores. En el año 2000 llegó su debut con los Leones de Yucatán, donde dejó números de 3-2 en 11 juegos y seis aperturas, en las que recetó 37 ponches en 43 innings y un tercio en su labor.
Eso fue suficiente para dar el salto a las Grandes Ligas. Lo demás, es historia. Los Leones, por su parte, viajaron a Ciudad de México, donde a partir de este viernes abren serie con los Diablos Rojos.
