La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Yucatán está realizando tareas de capacitación e información a los alarifes y personal de la construcción para mejorar sus capacidades y producción, pero también aspectos de salud emocional debido a la alta incidencia de suicidio entre los obreros de este sector.
Raúl Monforte González dirigente de la CMIC en el estado destacó que, el sector de la construcción ha ido superando el déficit de personal en las obras y para ello, está trabajando con las empresas afiliadas en la atención de los colaboradores con cursos e información para mejorar sus condiciones de trabajo, desempeño y productividad.
Expuso que, en los últimos meses, la demanda de mano de obra se redujo porcentualmente y en este momento hay una disponibilidad de unos 7 mil 500 empleos de manera inmediata, comentó que mediante la vinculación con universidades y organismos gubernamentales se ha logrado integrar atender la necesidad de mano de obra en los diferentes proyectos que se están edificando.
Destacó que, mediante estos eventos se ha logrado aminorar el rezago de capital humano que se está demandando en el sector, que sigue creciendo y donde se prevé que se mantenga en este ritmo por lo menos tres años.
Desde el año pasado, en la recuperación de la pandemia, la demanda de mano de obra se elevó hasta la exigencia de cerca de 11 mil puestos de trabajo, al inicio del presente año, esta demanda se redujo a unos 9 mil trabajadores y se han logrado colocar unas mil 500 plazas, es decir, aún existe un déficit de siete mil 500 obreros, para cubrir el 100 por ciento de la demanda en todo el Estado.
“Creo que hoy ya no es tan crítico el problema, se ha reducido en algún porcentaje, pero es difícil dar datos precisos porque no se reporta con la oportunidad que se debería” delcaró.
Informó que, entre las tareas que se están generando en la capacitación del personal es ofrecer cursos y talles informativos de salud emocional, todo ello, porque los reportes que se han realizando indican de un problema grave en el número de suicidios entre obreros de la construcción.
Detalló que, este problema es crítico no solo en Yucatán, sino también en otros estados del país, por ello, se ha replanteado las condiciones de trabajo, las opciones que requiere el personal de la construcción y buscar ofrecer una mayor calidad de vida para tratar de revertir este problema.
“El sector de la construcción, no solo en Yucatán, se está moviendo de una manera dinámica porque en todo el mundo ha entendido que para la recuperación después de una pandemia hay que invertir fuerte en infraestructura y la aplicación de recursos de forma transparente, genera prosperidad y desarrollo económico”, comentó.
