Para Armando Infante Gutiérrez, hijo del gran “Ídolo de México”, Pedro Infante Cruz, pasan y pasan los años y su señor padre sigue siendo “el campeón”, por lo que agradeció al público en general por mantener vivo el legado del exitoso cantante, pero sobre todo a los yucatecos por entregarse cada año a la memoria de su progenitor.

Como cada 15 de abril, se organizaron una serie de actividades para recordar a Infante Cruz, en la esquina de “La Socorrito”, en la calle 87 con 54 del centro de la ciudad, sitio exacto donde se presentó el accidente aéreo donde perdió la vida el actor sinaloense.
“Se siento bonito, felices de que avanza el tiempo y sigue siendo el primer lugar, en Los Ángeles se escucha su música también”, indicó Armando, antes de interpretar cuatro melodías.
“Estamos muy contentos de que él sea el campeón”, agregó.
Asimismo, Infante Gutiérrez resaltó el cariño y la comunión que siempre ha existido entre su padre y este estado, una relación que prevalece hasta hoy.

“Para los yucatecos fue un yucateco más, yo también y pienso quedarme a vivir aquí algún día, de verdad se siente muy bonito que lo quieran tanto”, manifestó.
Por su parte, doña María de los Ángeles Chan fue testigo de lo sucedido ese trágico 15 de abril de 1957, donde falleció su prima Ruth Rosell y que recuerda como si hubiese sido ayer.
“Fue un día un triste, a mi hermanita y a mí nos dio una crisis nerviosa del susto, paso sobre la casa de nosotros, teníamos techo de láminas y vibró todo” expresó.
“Mi prima estaba en la otra casa y al caer el avión la alcanzó, ahí estaba. Como a la media hora supimos que era la nave de Pedro Infante y cuando nos enteramos no lo creíamos, yo sólo gritaba no puede ser, no puede ser”, añadió.
Chan se declaró hasta hoy fan del cantante y actor, su película favorita es “Tizoc” y entre las canciones la preferida es la icónica “Amorcito Corazón”.
“Lo admiraba en ese entonces, era el ídolo de la época y sigue siendo, hay mucha gente que no lo vio, no lo conoció y hoy son sus seguidores”, finalizó.