[vc_row][vc_column][vc_column_text]A pesar de contar con los medicamentos efectivos para el control de la cirrosis hepática causada por la hepatitis vírica C, sólo algunos hospitales públicos cuentan con dichos fármacos, debido al burocratismo del sector salud, coincidieron especialistas integrantes de la asociación “En Hepatitis “C”uenta Conmigo”.
La gastroenteróloga Lourdes Lolbé Pinzón Teh lamentó el subregistro de esta patología, pues muchas personas la pueden tener sin que se den cuenta, y debido a su comportamiento o tipo de trabajo, pueden propagarla, y la situación empeora cuando ya tiene cirrosis.
Problema similar ocurre con las pruebas de detección del virus C, con una efectividad del 99 por ciento, las cuales están disponibles en los hospitales General Regional No 1 “Ignacio García Tellez” (T-1) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (Hraepy), y General – Escuela “Dr. Agustín O’Horán”.
En breve se ampliarán las actividades en otros nosocomios de Mérida y del interior del Estado.
Destacó la importancia de la detección oportuna de infectados con hepatitis C, lo que evitaría la propagación de este padecimiento así como también disminuiría el índice de mortalidad a causa de cirrosis.
Resaltó que las personas en riesgo de contagiarse de éste enfermedad están los homosexuales, las personas que tienen múltiples parejas sexuales, y las prostitutas, problema que se disparará ante la proliferación de la prostitución en línea.
Por su parte, Hilda García Manzanero, representante del laboratorio Gilead, indicó que el tratamiento tiene una efectividad del 99 por ciento en personas que a tiempo se le detectó la hepatitis vírica C.
Incluso, la tasa de cura para personas con cirrosis es del 95 porcentual, de ahí la importancia del control oportuno.
“La hepatitis C provoca la inflamación hepática, la cual puede tener una presentación crónica o aguda, mientras que la cirrosis tiene fases de las cuales, de la F1 a la F5, persona puede evitar la muerte a consecuencia de complicaciones del hígado”, acotó.
Pero, cuando la persona está entre la fase F5 y F6, desafortunadamente ya no tiene cura.
Pinzón Teh agregó que la hepatitis C es una enfermedad prevenible, y que en la actualidad tiene posibilidad de curación, de ahí la importancia de la detección oportuna.
“Esta patología es una causa importante de cirrosis hepática y cáncer hepático, y en primer caso, representa en México la cuarta causa de muerte”, subrayó.
Agregó que las otras personas en riesgo de contagiarse son las personas con tatuajes o piercings, los usuarios de drogas intravenosas así como las inhalables, hijos de madre portadoras del virus de la hepatitis C así como los infectados de VIH y hepatitis B, pacientes hemofílicos y con hemodiálisis, entre otros.
“De no detectar a tiempo esta enfermedad, generaría la aparición de la cirrosis hepática, y en la mayoría de los casos, las personas fallecen al no ser atendidos de manera adecuada”.
En lo que va del año, en el país hay 685 casos confirmados acumulados, con una disminución del 0.9 por ciento con respecto al mismo período de 2017, cuando la suma fue de 691.
Mientras que en el caso de Yucatán, la reducción es del 121.5 por ciento, al pasar de 16 a 14 personas infectadas, superando de manera significativa Quintana Roo, pues ya se detectaron siete casos, y Campeche, hay sólo uno.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
