En la Península de Yucatán aparece el primer caso de dengue, correspondiente a 2021, y la presencia de la letal patología aumentaría a partir del próximo mes, con el inicio de la temporada de lluvias, reveló la Secretaría de Salud federal.
El primer caso de dengue grave sucedió en Campeche, específicamente en la ciudad capital, por lo que Yucatán se mantiene libre de esta enfermedad vectorial desde hace 3.5 meses.
La Península de Yucatán es considerada como área endemoepidemiológica, dada la presentación constante de casos causados por el virus, mediante sus cuatro serotipos.
El dengue es una enfermedad prevenible cuya presencia se controla al tener el menor número posible de criaderos artificiales del díptero, y los vectores de tal padecimiento es el Aedes aegypti y el Aedes albopictus.
Debido a que el mosco es antrofílico (casero y urbano) no es factible encontrar casos de dengue en pequeños poblados, a menos que una persona fuera infectado en la ciudad y llegue a su comunidad.
El mosco hembra” es el que pica al hombre, para criar a los huevos, y luego depositarlos en sitios donde hay agua acumulada.
El brote de dengue es un ciclo normal, además que se trata de una enfermedad endémica, por lo que no desaparecerá del país, pero si se puede controlar.
Hasta la semana epidemiológica número 15, en el país hay 321 casos confirmados acumulados de dengue, con una disminución del 87.1 por ciento, con respecto al mismo período del año anterior, cuando la suma fue de dos mil 499. Desafortunadamente, hay una defunción, ocurrida en Colima.
La patología está distribuida en 21 entidades federativas, y tan sólo la semana pasada se registraron 21 nuevos casos, de los cuales, uno es de Campeche.
La mayor incidencia se registra en Colima, con 52 contagiados, el 16.2 por ciento; seguido de Veracruz, con 45 infectados, el 14 por ciento; Michoacán, con 40 positivos, el 12.5 por ciento; Guerrero, con 36 enfermos, el 11.2 por ciento; y Jalisco, con 33, el 10.3 porcentual.
Por el momento, 11 estados está libres de la patología, entre ellas Quintana Roo y Yucatán.
El mosquito Aedes aegypti es el vector del dengue, Chikungunya y Zika, algunas de ellas son mortales, las cuales son endémicas, es decir, ya forman parte de la región. En el caso de la fiebre amarilla, ésta ausente en la República Mexicana, al menos por el momento.
La proliferación del vector transmisor de la enfermedad se debe a la rápida reproducción del insecto, además que requiere de un mínimo volumen de agua para lograrlo.
El problema está en que ya se convirtió en un insecto casero y sus reservorios son los cacharros, de ahí la importancia de eliminar todos los recipientes que puedan contener agua.
Con sólo siete milímetros de dimensión, el mosquito hembra del tipo Aedes puede trasmitir la infección viral más importante en salud pública: el dengue.
De acuerdo con un reciente estudio, el mosco Aedes aegypti sufrió modificaciones en sus características biológicas, una evolución registrada al menos en Yucatán.
El díptero modificó su proceso de defensa y adaptación, por lo que ya son nuevos factores que se deben de tomar en cuenta para controlar la presencia, y así disminuir la presencia de ambos males.
Asimismo, el insecto ya puede como volar a alturas de hasta 10 metros cuando antes era de 1.5 metros. Puede depositar sus huevecillos a la altura de los tinacos de los segundos pisos de las viviendas.
Hasta hace unos años, la distancia de traslado era de unos 100 metros, pero ahora es de tres kilómetros, aproximadamente.
Incluso, anteriormente el Aedes aegypti sólo se encontraba a escasos centímetros dentro de los desagües pluviales y, ahora puede estar hasta cinco metros bajo tierra.
