Le imponen vivir lejos de ellas, pero las seguirá manteniendo

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Tras llegar a un acuerdo con sus víctimas, se ordenó la inmediata liberación de Juan Manuel Espínola Berzunza acusado del delito de violencia familiar, por el cual fue detenido y vinculado a proceso penal.

El golpeador de mujeres se acogió al beneficio de la suspensión condicional del proceso penal y se comprometió al pago de la cantidad de seis mil pesos por concepto de reparación de daño, a vivir en un predio en el fraccionamiento San Lorenzo de Umán y no ir el domicilio de las víctimas ni acercarse a ellas tampoco.

También debe someterse a tratamiento psicológico y tener un trabajo estable. Debe ir a firmar cada mes al Centro Estatal de Medidas Cautelares por un plazo de seis meses que durará el beneficio de la suspensión condicional.

En caso de cumplir con esas condiciones y compromisos durante seis meses, se declararía el sobreseimiento de la causa y la extinción de la acción penal. Sin embargo, de lo que no podrá librarse es de sus deberes de deudor alimentario, los cuales tendrá que cumplir hasta donde marca la ley para este concepto.

Al sujeto se le acusa de haber causado destrozos y golpear a su pareja sentimental y a su hija, en un predio de la colonia Díaz Ordaz, el pasado 7 de julio, cuando a petición de las agraviadas fue detenido por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

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