La Arquidiócesis reprueba la pornografía promovida por Yucatercos

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Con el restablecimiento de la página pornográfica “Yucatercos recargado”, sus coordinadores desafían a las autoridades del Estado, ya que hace tres meses entró en vigor la modificación al Código Penal para el combate del sexting y la porno-venganza, afirmó el vocero de la Arquidiócesis de Yucatán, Jorge Martínez Ruz.

Aseveró que “la Iglesia condena la creación de esas webs ya que es un atentado contra la dignidad de la persona y una pérdida de valores de las personas que ingresan a esas páginas (electrónicas)”

Debido a ello, hizo un llamado a las autoridades para cancelar el blog www.packsdemexico.com, donde se exhiben a muchachas de la Península de Yucatán, así como para vigilar e impedir la aparición de esos sitios webs así como el hacer cumplir la ley.

El entrevistado enunció los tres motivos por lo que cuales la Iglesia condenó tales páginas, en primer lugar, se utiliza la imagen de otra persona, ya que el material fotográfico y fílmico fue entregado a los administradores sin la autorización de la víctima.

Asimismo, en segundo término, es una flagrante violación a la dignidad del cuerpo de una persona, la cual es un acto reprobado desde el punto de vista religioso además que está penado por la Ley.

“La pornografía es mala, causa adicción y provoca que una persona se rebaje a sus pasiones, por lo que todo ello es un pecado, es un acto inmoral”.

Detalló que con la reaparición del blog Yucatercos se cometen tres actos inmorales, por lo que exhortó a las personas a no rebajarse con el consumo de pornografía, recomendó a las jóvenes a no tomarse fotos sensuales, y sugirió a no consultar tales páginas electrónicas, pues “si no hay usuarios, no haría esos sitios webs”.

Los “packs” o “zeldas” son archivos, paquetes o lotes de formatos de fotografía y video, los cuales contienen imágenes de mujeres desnudas, aunque también hay de hombres, los cuales son intercambiados por los usuarios.

Las fotografías o videos exhibidos tenían como destinatario original a las parejas o ex parejas de la persona afectada, pero que los poseedores del material u otro individuo, sin autorización alguna terminó por publicarlas en Internet.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

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