[vc_row][vc_column][vc_column_text]Izamal.- Frente a más de 500 participantes de diversos centros de educación superior del país, así como de una delegación proveniente de Francia, el director técnico de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur), Raúl Paz Noriega, inauguró el quinto Congreso Internacional de Turismo Rural, organizado por la Asociación Mexicana de Centros de Enseñanza Superior en Turismo y Gastronomía (Amestur) y la Universidad Tecnológica del Centro (UTC).
Al emitir su mensaje a nombre del Gobernador Mauricio Vila Dosal y de la titular de la Sefotur, Michelle Fridman Hirsch, el funcionario enalteció esta rama de la industria sin chimeneas como una oportunidad de diversificar las opciones productivas del estado.
“Cuenta con la capacidad de proporcionar un gran beneficio al promover la convivencia e interacción de las comunidades rurales en las que se desarrolla, mediante el aprovechamiento sustentable con fines turísticos de las expresiones sociales, culturales y productivas que cotidianamente se realizan en estos lugares”, apuntó.
Acompañado del alcalde anfitrión, Fermín Humberto Sosa, también recordó los Foros de Consulta “Rumbo a un turismo Sostenible en Yucatán” el pasado mes de abril en Izamal, de los cuales se acopiaron propuestas de estrategias y líneas de acción para la integración del Programa Sectorial de Turismo, que es la base de la política en la materia de la presente administración.
“Por eso nos interesa mucho que se realicen congresos como del nivel del que hoy nos reúne, para que se siga discutiendo y analizando entre estudiantes, académicos, expertos y actores de la sociedad esta modalidad de turismo rural, para el cual el estado de Yucatán tiene gran potencial”, sostuvo ante el presidente nacional de la Amestur, Onésimo Cuamea Velázquez, y el rector de la UTC, Ángel Antonio González Escalante
En ese sentido, desde los bajos del Palacio Municipal de Izamal, afirmó que lo anterior es gracias al legado ancestral que la civilización maya dejó en la península, en donde aún persisten figuras como la milpa tradicional maya, el huerto, la siembra en el canché, la casa maya con solar y otros estilos de agricultura y ganadería menor, que han evolucionado desde un pasado colonial y mestizo hasta nuestros días.
El turismo rural se caracteriza por el cuidado de los recursos naturales, culturales y sociales; o bien, en el respecto al patrimonio biocultural con todas las variantes que comprende, las cuales abarcan el etnoturismo, el agroturismo, los talleres gastronómicos, las vivencias místicas, el aprendizaje de dialectos, la ecoarqueología, la medicina tradicional, los talleres artesanales y la fotografía rural, por mencionar algunas de las más conocidas.
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