08 de febrero 2025

En Yucatán, unas 9 mil mujeres trabajan la apicultura

El trabajo de la apicultura es noble, las abejas son trabajadoras, inteligentes, sabias, dice Deisy Dzul, microempresaria y productora apícola de la comisaria de Xcunyá en el municipio de Mérida. Inicié muy chica, porque mis papás también trabajan la miel, cuando empecé tenía cuatro colmenas, ahora tengo más de 100 y doy cursos y asesorías para que más personas también trabajen con las abejas.

Deisy Dzul invitó a su casa al representante de este medio de comunicación ahí en Xcunyá, para compartir sus conocimientos sobre la apicultura. De manera sencilla, explicó que, las abejas trabajan más si les pones música, si hablas con ellas, si las cuidas y les das atención.

Las abejas son trabajadoras, saben dónde están las mejores plantas, porque buscan las plantas medicinales y sacan el polen que traen a sus colmenas para poder producir el mejor producto, dice Deisy. “Aquí en Xcunyá, estamos cerca del club de golf, las abejas no van allá, porque ahí fumigan las plantas con insecticida y eso daña a las abejas”, señala nuestra entrevistada.

Cuando una abeja se enferma cambia el sabor de la miel, pero también afecta a la colmena, por eso también debemos cuidar que no se enfermen, agrega. Las abejas no cambian de casa, apunta, cada abeja reconoce su colmena, trabaja para una sola reina, no puede ir a otra colmena, porque sabe muy bien donde está su familia, agrega.

Deisy, es la propietaria de la marca Jats’uts Kaab “Bonita abeja”, trabaja con su hija y su esposo la apicultura, creó su línea de productos y también ofrece trabajo de asesoría para otras mujeres rurales para crear y producir miel. Cosecha miel, cera, polen con abejas meliponas y se ha especializado en la realización de productos de belleza y también fabrica jabones, ungüentos para la piel y rostro, caramelos, dulces y realiza repostería con miel que produce.

Y continúa su explicación, cuando una colmena es fuerte, se nota, en cambio cuando una colmena es débil la miel es menor y las abejas no producen de la mejor manera, apunta. Las abejas saben bien cuando cambia la temporada, buscan las flores de la naranja, del Nin, que son plantas medicinales. Cuando no ha llovido mucho, entonces hay que darles alimento, pero no mucho, porque ellas deben salir a colectar su comida, asegura.

–Yo converso con ellas, todas las mañanas, cuando me levanto les pongo música, la de los grupos musicales de acá de Yucatán y ellas están listas para ir a trabajar, agrega. Antiguamente, se decía que las abejas saben con quién trabajan, perciben quiénes somos y también, el cariño y la atención que les dedicamos, tenemos que animarlas”, puntualiza.

Deisy le está enseñando a su hija, que ya se graduó de profesora de educación especial en la tarea de la atención de las abejas. Quizá no se quiera dedicar a ello, dice la mamá, pero sabe lo importante que es qué, gracias al trabajo de las abejas, ella pudo estudiar y tener una profesión, enfatiza.

Hay que enseñarles a las nuevas generaciones el trabajo de las abejas, apunta, porque es una tarea noble, las abejas son trabajadoras e inteligentes, nosotros tenemos que aprender de ellas, manifiesta.

Hay muchas personas que han venido para aprender, sobre todo gente de México, de Monterrey, incluso de la Universidad de Yucatán (Uady) han venido para hablar sobre el trabajo de las abejas, yo les he dicho lo que he aprendido del trabajo de todos los días.

Las abejas meliponas no tiene aguijón, no ‘pican’ son inofensivas. Las abejas puedan producir miel y también pueden ser un producto que ayude a la economía, señala. Acudo a los eventos del ayuntamiento de exposición y venta de productos y mucha gente ya conoce mi marca y le gusta la miel que producimos, eso es bueno, porque trae dinero a la casa, comentó.

Deisy Dzul vendrá la siguiente semana vendrá a Mérida para participar en la Feria de la Miel en la Plaza Grande, el día 26, como parte de la celebración del Hanal Pixán. Es bueno, dijo, que podamos vender nuestros productos y las personas compren miel que fabricamos en casa, es un producto que siempre es bueno tener, porque fortalece la alimentación y se puede usar como medicina y también tener una mejor salud, comentó.

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