En política las mujeres están realmente solas en Yucatán

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Antes que maestra, investigadora, ex funcionaria, escritora y docente, Georgina Rosado y Rosado es mamá y feminista. Por eso, la plática que sería sobre el proceso electoral y la paridad de género, empezó desafortunadamente con un feminicidio: el reciente hallazgo del cuerpo sin vida de Mara Castilla, asesinada por el conductor de Cabify Ricardo Díaz, en Puebla.

“No podemos obviar que las mujeres estamos en situación de peligro. Vivimos en una sociedad patriarcal, aunque no sea lo idóneo. Y esto lo digo como feminista y como madre. Es necesario que se creen mecanismos de autodefensa para cuidarnos, hay que andar en grupos, usar taxis conducidos por mujeres… Ni modos… Tampoco es justo que no podamos salir ni mucho menos que tengamos que usar burka”, señala.

Y los simbronazos de esa sociedad patriarcal impactan sin duda en el proceso electoral que ya está en marcha para 2018 y que debe hacer vigente los derechos de paridad de género que prevé la Constitución, la Ley General de Instituciones y los Procesos Electorales y Partidos Políticos. Es por eso que Rosado y Rosado ofrece su punto de vista al respecto a fin de aclarar un poco más el panorama que se avecina.

Yucatán Ahora: Si la igualdad política debe ser construida a partir de una igualdad de género ¿Cómo estamos en ese aspecto a nivel país y estado?

A nivel igualdad de género estamos muy mal. Logramos disminuir las brechas existentes, sin embargo sigue habiendo porcentajes de desigualdad en cuanto a educación.  Es el caso de maestrías y doctorados, donde la igualdad se desploma. Las mujeres salen de sus carreras con promedios mejores que los hombres pero cuando llegan a las maestrías o doctorados, se le da preferencia al hombre para continuar los estudios porque las obligaciones domésticas y de los hijos siguen siendo de las mujeres. Esto tiene que ver con la participación política y la paridad, porque ‘no tengo maestría ni logré juntar suficiente experiencia laboral porque me tengo que encargar de la casa y de los hijos’, y así entras a la contienda de la desigualdad.

Un ejemplo… Mira, yo fui dirigente del PRD y entras en un ambiente masculino. En los partidos políticos no hay guarderías y los horarios y tiempos con hijos muchas veces no te permiten participar en diversas dinámicas.

¿Cuál es el costo para las mujeres que quieren participar en política?

Es muy alto porque hay una sobreexplotación de las mujeres. No hay equilibrio y si vamos a participar a la par de los hombres en política, ellos deben participar como hombres a la par nuestra. Y en cuanto a la formación académica, no necesariamente deben ser maestras o doctoras, hay mujeres sindicalistas o líderes de comunidades con mucha experiencia que le pueden aportar a la comunidad.

¿Y cree que podrán obtener resultados favorables?

En 2006 se hizo un foro de mujeres líderes de las comunidades de todos los partidos políticos para discutir las condiciones en las que participaban. Estas mujeres explicaban cómo la utilizaban para llenar plazas o mítines pero a la hora de los cargos, los hombres utilizaban esos espacios para mujeres que pudieran controlar para perpetuarse en el poder, como esposa, hijas o amantes. De esta forma seguían gobernando a través de otra figura y les impiden el paso a las mujeres que se han esforzado. Un ejemplo que vi es el de las mujeres de la Ciénaga de Progreso, yo las llamo Amazonas.

Los órganos electorales tienen una tarea que podría llamarse titánica para lograr la paridad de género ¿Cree que lo lograrán? Qué mensaje le daría a una mujer afiliada a un partido e interesada en ascender en la política?

Las mujeres que no lleguen acompañadas a esa instancia de redes y grupos sociales feministas que las apoyen, la pueden pasar muy mal porque llegas y te enfrentas al patriarcado. O tus compañeros hombres te van a poner obstáculos o te enfrentas a la presión de los gabinetes. Para que una mujer logre sostenerse en la política y avanzar en el poder debe estar apoyada por otros grupos de mujeres porque si llegas sola, ahí te ves… Esas redes y grupos que te apoyen te permitirán abrirte espacios.

¿Y esas redes deben ser apartidistas?

Lamentablemente muchas veces se partidizan. En ese sentido debemos hacer un acto de reflexión para no perder autoridad moral. Esas redes deben ser apartidistas y debe existir más sororidad, que significa solidaridad entre iguales. Falta mucho en esa construcción, está declarada pero no es hecho real. El patriarcado nos ha dividido y enfrentado.

¿Qué considera que se puede hacer de ahora en adelante para el futuro con las nuevas generaciones de mujeres que se interesen por la política?

Hay un retroceso en la educación al respecto, se han quitado materias que generaban un elemento crítico y se reemplazaron por elementos con moralina. A cambio “achocaron” dos hojitas sobre el movimiento feminista entre textos patriarcales. Otro ejemplo es la historia de Yucatán, ya no se menciona la lucha en los congresos feministas que plantearon temas que aún están vigentes. Si no conoces tu historia, no conoces que ha pasado en tu tierra y para comprender tu presente debes entender tu pasado. Hay que agradecer a nuestras ancestras como Rita Cetina, Consuelo Zavala, Dominga Castro Pastrana, gracias a ellas logramos cosas y si no reconocemos esa lucha, no se reconoce qué hace falta.

¿Cómo se sigue?

Tenemos que reconocer que hay una historia donde hubo avances y retrocesos, porque no es lineal. Nada nos debe desanimar, nos debe ayudar a organizarnos mejor, establecer sororidad, redes, grupos de apoyo. El patriarcado nos castiga y reacciona ante nuestros avances. ¿Qué hacemos? Seguir adelante, siempre.

Cecilia García Olivieri.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

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