Cambian armas de juguete por juegos didácticos y tradicionales

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Las caras de dormidos los delatan pero, en el fondo, no les importa. Porque aunque sean las 8:30 am, es viernes, mañana no hay escuela y hoy se van a casa con un juguete nuevo.

Miguel Angel y Andry tienen 10 y nueve años, respectivamente y son alumnos de la primaria Ignacio Ramírez López. Hoy representan a su casa de estudios junto a niños de otras dos primarias meridanas que vinieron al 11° Batallón de Infantería a cambiar sus juguetes belicosos por unos didácticos y tradicionales en el marco del programa “Juguemos sin violencia”, auspiciado por la Secretaría de Defensa Nacional y el Ayuntamiento de Mérida.

Miguel Angel trajo un arma de juguete para que se destruya y, a cambio, recibirá un juguete nuevo didáctico. El tema de ver su arma destruida no le quita el sueño y cree que es mejor jugar con juguetes “Que no tengan balas para que así no haya más violencia”. “No hay que crecer con armas porque así te vuelves un asesino”, opinó.

Andry lo escuchaba atentamente y agregó que a él ni le gustan los juegos de computadoras violentos. “Yo juego Roblox o Minecraft y pienso que si juegas con armas violentas te vuelves conflictivo, por eso está mejor un mundo sin violencia”, declaró. Para Andry las armas de verdad se deben quedar en el ejército.

Durante el evento participó el teniente coronel César Amaya Becerra quien habló de la importancia de la campaña que logró destruir 841 juguetes en Mérida, Valladolid, Peto y Xocchel.

“El propósito de “Juguemos sin violencia” es el de generar un cambio de conducta entre niños, niñas y jóvenes para que eviten el uso de réplicas de armas de fuego intercambiándolos por juguetes didácticos y tradicionales que generen en los chicos valores como la amistad, lealtad, dedicación al estudio, respeto por los demás y la tolerancia”, manifestó el funcionario militar.

 

Durante su intervención, el alcalde Renán Barrera Concha, aplaudió la iniciativa de cambiar y destruir réplicas de armas violentas por juguetes didácticos y tradicionales e hizo hincapié en la importancia de promover estos valores desde la familia. “Estas acciones representan el esfuerzo que hacemos como sociedad para preservarles una infancia sana”, manifestó.

Luego del banderillazo de más de los estudiantes de primaria, una topadora destruyó numerosos juguetes ante las miradas asombradas de los chicos. La campaña “Juguemos sin violencia” retomará actividades de recolección y destrucción de juguetes bélicos en diciembre o enero próximo y, según informó el teniente coronel Amaya Becerra, por ahora no existe ningún programa que motive o inculque la no violencia en juegos virtuales.

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