En la Península de Yucatán, apicultores están en estado de alerta debido a la muerte masiva de abejas en diversas comunidades.
Este fenómeno ha sido atribuido principalmente al uso indiscriminado de agroquímicos y plaguicidas en la región, lo que ha generado graves consecuencias para la actividad apícola y el medio ambiente en su conjunto.
Los apicultores de la zona han expresado su preocupación y han señalado directamente a empresas privadas por el uso de estos productos químicos, los cuales, según ellos, han sido los responsables de la pérdida de miles de colmenas de abejas.
En conferencia de prensa, los apicultores precisaron que tan sólo en comunidades mayas del noreste y oriente de Tizimín se perdieron unas 600 colmenas, aunque hubo otras tantas que no se reportaron, redundando en pérdidas arriba de los 4 millones de pesos para las familias que viven de esta actividad.
En el caso de Campeche, se reportó la afectación de más de 3 mil 650 colmenas muertas en dos comunidades por el aparente uso de un químico que ya fue prohibido por las autoridades federales.
“El insecticida que mató a las abejas fue fipronil. La Cenacica ya hizo estudios y también dijo que fipronil y el gobierno no ha hecho nada por repoblar las colmenas o por lo menos, una sanción o amonestación a quien lo usó”, acusó Benjamín Yeh Acosta, apicultor de Campeche.
Además del impacto económico, la muerte masiva de abejas pone en riesgo la seguridad alimentaria y la biodiversidad, dado el papel fundamental que desempeñan estos polinizadores en la reproducción de cultivos y en la preservación de ecosistemas.
Ante esta situación, los apicultores han exigido a las autoridades la implementación de políticas públicas efectivas que protejan a las abejas y su hábitat natural.
“No hay una política pública. Necesitamos políticas públicas de protección y conservación de los espacios del hábitat natural de los polinizadores, especialmente de las abejas. Eso es lo que vamos a exigir y estamos exigiendo a la nueva autoridad”, acusó Leydi Pech Martín, integrante de la Alianza Maya por las Abejas.
Asimismo, hacen un llamado a los candidatos a diversos cargos de elección para que consideren la situación de la actividad apícola y se comprometan a establecer programas de protección y conservación de estos importantes polinizadores.