La soledad fue mala compañera, incluso lo abandonó ya muerto

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Aunque no tuvo una muerte natural, tuvieron que pasar algunos días para que el cuerpo de un vecino de la Unidad Morelos fuera descubierto, cuando de su vivienda comenzó a emanar un fétido olor.

Jorge Cuevas, de 65 años y quien vivía solo, sin siquiera una mascota que lo acompañara, fue descubierto a media mañana de este domingo, luego de que la gente que vive en predios aledaños reportara un fuerte mal olor que provenía de la casa del sexagenario.

Al lugar se presentó una mujer que se identificó como sobrina de don Jorge, pero como carecía de llave, no pudo permitir el acceso para verificar lo que ocurría en el interior.

Sin embargo, no era difícil intuir que al menos había alguien muerto en el interior, por el fétido olor y porque en las ventanas había muchas moscas.

Un rato después llegaron al lugar peritos en criminalística y personal del Semefo, que entraron a la casa y descubrieron el cuerpo del señor Cuevas, quien se había ahorcado.

Enseguida se procedió a las diligencias de ley, entre ellas del levantamiento del cadáver.

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